Páginas

jueves, 13 de septiembre de 2012

La cosecha de cereal acaba con precios históricos para las materias primas

La evolución de esta campaña supone alterar la tendencia habitual, según la cual el verano era la época de cotizaciones más bajas
 
Los mercados mundiales han desbaratado la norma general según la cual con el final de la cosecha se hundían los precios del cereal, debido a que era el momento de mayores existencias. Aunque durante décadas ha sido así, este año vienen incrementándose los precios desde hace meses y cada semana baten nuevos récords.
La Lonja Agropecuaria de Segovia marcó la semana pasada una cotización de 239 euros la tonelada de trigo, dentro de una tendencia alcista. “A pesar de que hay pocas transacciones, aún no se espera que se produzca un cambio de signo en la cotización de los cereales durante las próximas semanas, y por lo tanto continuarán los precios elevados”, advierte el presidente de la Lonja, Nicéforo González.
De este modo es posible que en la reunión que se celebre hoy se vuelvan a marcar valores al alza. La semana pasada la tonelada de cebada cotizó a 228 euros, y la de centeno a 222 euros.
La situación es generalizada en todos los mercados nacionales y en los internacionales. En este sentido, el presidente de la Lonja es contundente, pues cada vez se imponen más las circunstancias de otros países. De este modo en los precios que cobrará un agricultor segoviano por su producción influye cada vez más la situación de la cosecha en Ucrania o en Brasil, que si ha afectado la sequía en los cereales de Castilla. Así lo mantiene el empresario segoviano Pedro Palomo, quien realiza habituales transacciones comerciales con productores de otros países y que además presta servicios de compra-venta para los cerealistas segovianos.
En esta tesitura, el continuo alza de los precios influyen de forma positiva en los ingresos de los agricultores. Pero, por el contrario, perjudican a los ganaderos, que ven cómo van aumentando los costes de producción a los que deben hacer frente para adquirir el pienso de alimentación.
Pero si los ganaderos son los primeros que alzan la voz para advertir de su difícil situación por este progresivo encarecimiento, también se dejará sentir en el consumidor doméstico, pues en productos básicos como el pan, la carne u otros como la cerveza, repercutirá igualmente, más pronto que tarde. De hecho, la mayor parte de los cereales y oleaginosas susceptibles de ser aprovechadas para la alimentación humana o animal han duplicado su precio desde el inicio de la actual crisis económica en el año 2008.

Especialmente significativa ha sido la evolución experimentada por los valores de la soja y el maíz, dos de las materias primas más empleadas en la fabricación de piensos y concentrados alimenticios para el ganado, que han alcanzado máximos históricos en los últimos días. Mientras la soja cotizó a 692 dólares la tonelada (550 euros), el precio del maíz se situó en 338 dólares (casi 270 euros), según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), referidos a la Bolsa de Chicago, y que son precios más altos que en España.
Desde las grandes empresas se sostiene que en esta tendencia incide la fuerte especulación que pesa sobre el mercado cerealístico y que lo están ejerciendo los fondos de inversión internacionales. A todo ello se unen también unas condiciones climatológicas que pronostican cosechas más escasas de lo esperado y por tanto, —dado que la demanda no solo se mantiene sino que aumenta—, mayores precios en el futuro. Algunos países exportadores como Rusia, tercer productor mundial de grano, ha vuelto a revisar a la baja su volumen de producción de este año.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario