Las cotizaciones en la Lonja de Cereales de Barcelona prueban la apatía en las transacciones
Los mercados de cereales muestran pocos movimientos y ligeras bajadas de precios, en un momento en que los comerciantes empiezan a prestar más atención a la nueva campaña y las previsiones internacionales parecen confirmar una oferta estable, frente a la sequía española.
Las cotizaciones en la Lonja de Cereales de Barcelona, registradas este martes, prueban la apatía en las transacciones, ya que tanto en la cebada como en el maíz no ha habido variaciones respecto a la semana anterior. En Barcelona, la cebada se vende a 178 euros/tonelada, el maíz importado de la Unión Europea (UE), a 186 euros/tonelada, y el procedente de otros orígenes, a 178 euros/tonelada. Sin embargo, el trigo ha bajado de precio, hasta los 204 euros/tonelada (-1 euro respecto a la semana anterior), en el caso del forrajero, y a los 210 euros/tonelada para el panificable (-2 euros/tonelada). "En el mercado, los operadores comienzan a prestar más atención a la nueva campaña que a los remanentes de los almacenes, con lo que el ritmo de operaciones se ha mostrado flojo y más especulativo que efectivo", según fuentes de la comunidades autónomas.
A escala internacional, los precios del trigo han experimentado descensos y en plazas como París o la Bolsa de Chicago (EEUU) han disminuido a niveles que no se registraban desde febrero, según un análisis del banco alemán Commerzbank.
Una razón, según dicho informe, es la publicación del informe mensual del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA), quien ha revisado al alza sus estimaciones de cosechas mundiales para la campaña 2014-2015. Según el USDA, la producción global de cereales se situará en 2.441 millones de toneladas, 6 millones de toneladas más que las estimaciones difundidas en mayo. El incremento se debe a mayores aforos para la Unión Europea (UE), China, India y Rusia. No obstante, los analistas consideran que la fuerte caída en los precios del trigo es "exagerada" y que esa tendencia no puede sostenerse a largo plazo.
Por otra parte, el conflicto entre Ucrania y Rusia está teniendo menos impacto en las producciones de maíz que lo que los operadores pensaban cuando estalló, según el banco alemán. Aunque el panorama es estable, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha avisado esta semana de que los cultivos de Sudamérica y el Caribe, África y el sudeste asiático podrían quedar afectados por el fenómeno meteorológico de "El Niño" en la campaña 2014-2015.
En su última actualización del Sistema Mundial de Información y Alerta sobre la Alimentación y la Agricultura (SMIA), la FAO ha indicado que el impacto de "El Niño" sería mayor en las producciones de esas regiones durante el período de octubre a marzo. En Latinoamérica y el Caribe las "fuertes lluvias a final de año podrían retrasar" la plantación de cereales, que serían cosechados a partir de marzo, según la FAO.
En África meridional se prevé también la probabilidad de un menor número de precipitaciones en la época de lluvias, lo que desembocaría en una limitación del desarrollo de los cultivos y de su rendimiento.
Por otro lado, en el cuerno de África habrá una "alta probabilidad" de precipitaciones por encima de lo normal, lo cual beneficiaría a la segunda temporada de cultivos, aunque podría interrumpir la cosecha principal de grano que se da entre octubre y noviembre.
Los mercados de cereales muestran pocos movimientos y ligeras bajadas de precios, en un momento en que los comerciantes empiezan a prestar más atención a la nueva campaña y las previsiones internacionales parecen confirmar una oferta estable, frente a la sequía española.
Las cotizaciones en la Lonja de Cereales de Barcelona, registradas este martes, prueban la apatía en las transacciones, ya que tanto en la cebada como en el maíz no ha habido variaciones respecto a la semana anterior. En Barcelona, la cebada se vende a 178 euros/tonelada, el maíz importado de la Unión Europea (UE), a 186 euros/tonelada, y el procedente de otros orígenes, a 178 euros/tonelada. Sin embargo, el trigo ha bajado de precio, hasta los 204 euros/tonelada (-1 euro respecto a la semana anterior), en el caso del forrajero, y a los 210 euros/tonelada para el panificable (-2 euros/tonelada). "En el mercado, los operadores comienzan a prestar más atención a la nueva campaña que a los remanentes de los almacenes, con lo que el ritmo de operaciones se ha mostrado flojo y más especulativo que efectivo", según fuentes de la comunidades autónomas.
A escala internacional, los precios del trigo han experimentado descensos y en plazas como París o la Bolsa de Chicago (EEUU) han disminuido a niveles que no se registraban desde febrero, según un análisis del banco alemán Commerzbank.
Una razón, según dicho informe, es la publicación del informe mensual del Departamento de Agricultura de EEUU (USDA), quien ha revisado al alza sus estimaciones de cosechas mundiales para la campaña 2014-2015. Según el USDA, la producción global de cereales se situará en 2.441 millones de toneladas, 6 millones de toneladas más que las estimaciones difundidas en mayo. El incremento se debe a mayores aforos para la Unión Europea (UE), China, India y Rusia. No obstante, los analistas consideran que la fuerte caída en los precios del trigo es "exagerada" y que esa tendencia no puede sostenerse a largo plazo.
Por otra parte, el conflicto entre Ucrania y Rusia está teniendo menos impacto en las producciones de maíz que lo que los operadores pensaban cuando estalló, según el banco alemán. Aunque el panorama es estable, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha avisado esta semana de que los cultivos de Sudamérica y el Caribe, África y el sudeste asiático podrían quedar afectados por el fenómeno meteorológico de "El Niño" en la campaña 2014-2015.
En su última actualización del Sistema Mundial de Información y Alerta sobre la Alimentación y la Agricultura (SMIA), la FAO ha indicado que el impacto de "El Niño" sería mayor en las producciones de esas regiones durante el período de octubre a marzo. En Latinoamérica y el Caribe las "fuertes lluvias a final de año podrían retrasar" la plantación de cereales, que serían cosechados a partir de marzo, según la FAO.
En África meridional se prevé también la probabilidad de un menor número de precipitaciones en la época de lluvias, lo que desembocaría en una limitación del desarrollo de los cultivos y de su rendimiento.
Por otro lado, en el cuerno de África habrá una "alta probabilidad" de precipitaciones por encima de lo normal, lo cual beneficiaría a la segunda temporada de cultivos, aunque podría interrumpir la cosecha principal de grano que se da entre octubre y noviembre.
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